Los que habéis estado en contacto conmigo durante mi estancia en Saint Laurent sabéis que he estado haciendo bastante deporte, jugaba en el club local de ping-pong, jugaba al fútbol y al basket con los chavales del pueblo y también iba a correr varios días. Ya que debido al clima se suda una barbaridad, me estaba quedando hecho un palo (con lo que he llegado a ser yo) así que decidí buscar un gimnasio en el pueblo y apuntarme. El único gimnasio que encontré es el gimnasio municipal, las tarifas estaban bastante bien, 70€ por 3 meses y 120€ por 6 meses, lo que no estaba tan bien eran las instalaciones, como a continuación os pasaré a relatar.
El “gimnasio” es una sala de unos 30m2 sin aire acondicionado, petada de máquinas de dudosa modernidad y con páginas del Muscle Mag pegadas por las paredes, las mancuernas que había eran en su mayoría de esas tipo forzudo de circo con bolas, en vez de discos, y estaban algo oxidadas también.
Pero bueno, el caso es que los aparatos si que servían para hacer ejercicio, y así lo habían entendido todos los usuarios del gimnasio, porque los 30m2 de sala estaban casi siempre llenos. Había unas 40 personas apuntadas, de esos 40, 35 eran negros y 5 blancos. Y de esos 35 negros, quitando a 3 o 4 gordos los demás eran todos unos mega animales. La mayoría de negros ya están “cuadraos” pero si encima van al gimnasio son unos mega animales que levantan tropecientosmil kilos.
Y claro llegas al gimnasio y te encuentras de 4 a 6 negracos enormes monopolizando las pocas máquinas que hay, y acojona un poco al principio, luego los vas conociendo y son majos (Y mejor tenerlos como amigos) También hay en la pared carteles que dicen : “prohibido hacer ejercicio sin toalla y en chanclas”, los francoguayaneses son un poco de pasarse las leyes por el forro y con las normas del gimnasio no iban a hacer una excepción. Si, eso de usar toalla para utilizar las máquinas no se da muy a menudo, y entre el calor que hace y el ejercicio pues todos a sudar como cerdos. Que “gustico” daba cuando te decían ya puedes ponerte ya he terminado con la máquina y la veías ahí resplandeciente de sudor, y tu te decías “venga, allá vamos”
Otra cosa curiosa era que todos los usuarios cuando entraban a la sala, le daban la mano a todos los que había dentro de la sala, eso me pareció bastante educado, pero la verdad es que allí todo el mundo se saluda por la calle, y te dicen buenos días aunque no te conozcan.
Me hubiera gustado poner fotos del gimnasio, pero siempre se me olvidaba la cámara y no he encontrado ninguna foto en internet. Pero para compensar os pongo este video del campeonato de Power-Lifting donde salen casi todos los mazaos del gimnasio y mucha gente que conozco del pueblo, además de algún alumno.
PD: No, yo no salgo en el video, ya estaba en España cuando se hizo el campeonato, que si no...